viernes, 24 de julio de 2020

El perdón a cuento

Cada vez que una persona logra perdonar honestamente y desde su tierno corazón, un ángel en el cielo gana sus alas... pero luego se les llenan de ácaros y hay que darles mantenimiento y desparasitarlos, o se atoran en las turbinas de los aviones y causan accidentes y así. Por no mencionar anécdotas como la que nos cuenta el Gabo García Marquez, acerca de "un señor muy, muy viejo con las alas enormes", que vino a perturbarle la vida a una sencilla familia colombiana, al caerles súbitamente sobre las láminas de su granero.

No, por practicidad hay que poner a revisión el perdón, para no andar por ahí haciendo estropicios. 

Para muchas religiones, el perdón es un acto de amor al prójimo, que tiene un poco que ver con aquella cuestión de poner la otra mejilla. Perdonar es reencontrarse con la persona que debido a un descuido o acaso franca estupidez, te ha lastimado. Para el #budismo, el perdón es un acto de compasión que, empleando otras palabras, consiste en ponerte en los zapatos apretados de la otra persona. Él o ella te han herido porque a su vez, arrastran un gran sufrimiento y es eso lo que tienen para dar. 

Nadie da lo que no tiene, como el olmo, que no tiene ni una sola pera para ofrecer. Y si en mi interior hay sufrimiento de sobra, eso es precisamente lo que tengo para compartir. #DeNada

Identidad y Feminismo

Cuando ellas hablan de feminismo, están hablando de su identidad misma, porque “identidad” no solamente es identificación, sino también roles, cotidianidad y el lugar que nos damos frente al mundo.

Cuando cada quien define su identidad, está dando respuesta a la pregunta crucial de “¿quién soy yo?”, y también “¿qué significas tu para mi?” y “¿quién soy yo para ti?”.

Como un efecto dominó, responder a la primera pregunta genera los recursos suficientes para dar solución a la segunda, y posteriormente a la tercera; pero la cosa no termina ahí, dado que al saber quienes somos, podemos dar una respuesta efectiva a un montón de preguntas relevantes que van a determinar el curso de nuestras vidas, y si bien esa colección de nuevas interrogativas va sucediendo utleriormente, sobre la marcha, en la práctica no vienen siendo menos importantes que nuestra primera pregunta.

¿Quién soy?

Identidad y Feminismo

Cuando ellas hablan de feminismo, están hablando de su identidad misma, porque “identidad” no solamente es identificación, sino también roles, cotidianidad y el lugar que nos damos frente al mundo. Cuando cada quien define su identidad, está dando respuesta a la pregunta crucial de “¿quién soy yo?”, y también “¿qué significas tu para mi?” y “¿quién soy yo para ti?”.

Como un efecto dominó, responder a la primera pregunta genera los recursos suficientes para dar solución a la segunda, y posteriormente a la tercera; pero la cosa no termina ahí, dado que al saber quienes somos, podemos dar una respuesta efectiva a un montón de preguntas relevantes que van a determinar el curso de nuestras vidas, y si bien esa colección de nuevas interrogativas va sucediendo utleriormente, sobre la marcha, en la práctica no vienen siendo menos importantes que nuestra primera pregunta.

¿Quién soy?

...mira nena, tu eres una niña, vistes de rosa, eres linda, y calladita te ves todavía más bonita. En la vida, a ti te toca vestirte coqueta y de colores pastel; serás maestra, enfermera o cocinera, aunque lo más probable es que crezcas para casarte y tener hijos, porque mira nena, tu eres una madre en formación. Déjame, nena, instruirte acerca de no preferir lo que implique esfuerzo físico, a las nenas no les queda bien sudar; no te debe de gustar lo que le gusta a los niños, jamás te confundas, y sentiría mucha decepción de ti, si me entero que andaste por ahí haciendo aspavientos y levantando la voz.