La Magia de las Emociones

Ahora con ustedes, un acto de magia. Miren con detenimiento mi Sombrero Negro, observen que está completamente vacío... y sin emociones.

Estoy tranquilo, estoy a gusto conmigo y con el mundo. Entonces voy a introducir algunos pensamientos catastróficos, un par de datos ambiguos a los que les atribuiré lo peor, y un puñado de las peores anécdotas que conozco, pero que no tienen naaada que ver conmigo.

Ahora denme unas horas, porque voy a estarles dando vueltas y vueltas, y vueltas dentro de mi sombrero con esta varita.

Y voila¡! ¿Que tenemos aquí? Miren como nuestra bella edecán va sacando del sombrero un miedo atroz, varias inseguridades y una feroz desesperanza que podría devorar los proyectos de cualquiera.

Para nuestro siguiente acto, invitaremos a una persona del público. Pase usted señorita, tan segura de si misma, tan empoderada... ahora permítame encerrarla en estos miedos e inseguridades, le damos unas vueltas para marearla un poco y ¿que tenemos?


...un conejito asustado¡! Por favor regálenle un fuerte aplauso!! ...y un poco de lechuga. Gracias.

A continuación, contemplen este Sombrero Amarillo. Miren que es un sombrero de copa absolutamente ordinario, que carece de salida por el otro lado. Dejémoslo en la mesa, a la vista de todos, y coloquemos en su interior todos nuestros miedos, nuestras inseguridades y las ideas más catastróficas que tengan a la mano.

Por favor, señores de la producción, bajen la intensidad de las luces... gracias... Damas y caballeros del público, les pido ahora completo silencio.

...compartan conmigo tres respiraciones profundas y despacio, muy despacio y con absoluta convicción, repitamos juntos las palabras mágicas: #EstoyAcargoDeMiVida, #ElFracasoEsPartePositivaDeMiCamino, #MeDoyPermisoDeNoSerPerfectx.

Una vez más, por favor... muy bien... demos unos pases mágicos...

Y ¿que tenemos aquí amable público? ...efectivamente¡!, sean ustedes testigos de que el miedo, la inseguridad, y las ideas catastróficas han desaparecido por obra de magia¡! En su lugar tenemos un refrescante manantial de aguas cristalinas. Pueden acercarse con sus copas, por supuesto...

Por favor regálenme un fuerte aplauso... gracias... gracias... agradecemos al municipio de Tehuacán por su apoyo, gracias...

Y... este ha sido el gran show de las emociones, donde, desde la nada atraemos los miedos más atroces, y de igual modo los devolvemos de donde han venido, si conocemos las palabras mágicas adecuadas. Todo con el poder de nuestros pensamientos.