miércoles, 24 de octubre de 2018

Nuestra postura frente al cambio

Cuéntame una cosa, ¿tu crees que la gente puede cambiar? Esta discusión es mucho más vieja que tu y que yo, y que ella o el, todos juntos, porque a lo largo de la historia la filosofía ha tratado de dar una respuesta conclusiva al problema, pero nada más no logramos ponernos de acuerdo.

A los cerebritos que han tratado de contestarla, podemos separarlos en dos equipos: el #TeamParménides y el #TeamHeráclito.

El filósofo Parménides decía que todo en el vasto universo permanece y que cualquier cambio que creamos ver, es sólo aparente. Por supuesto que el afirmaba de paso, que la gente no cambia y que solo nos adaptamos superficialmente a las exigencias de cada situación. Ya sabes, “no hay nada nuevo bajo el sol”.

El filósofo Heráclito, por su parte, sostenía que lo único permanente en el universo, es el cambio; y que nunca podrás bañarte en el mismo río, o simplemente bañarte… si vives en la CDMX. El cambio implica un devenir constante de sucesiva transformación y renovación, porque ya sabes “nada se crea ni se destruye…”.

Nuestra postura frente al cambio

Cuéntame una cosa, ¿tu crees que la gente puede cambiar? Esta discusión es mucho más vieja que tu y que yo, y que ella o el, todos juntos, porque a lo largo de la historia la filosofía ha tratado de dar una respuesta conclusiva al problema, pero nada más no logramos ponernos de acuerdo.

A los cerebritos que han tratado de contestarla, podemos separarlos en dos equipos: el #TeamParménides y el #TeamHeráclito.

El filósofo Parménides decía que todo en el vasto universo permanece y que cualquier cambio que creamos ver, es sólo aparente. Por supuesto que el afirmaba de paso, que la gente no cambia y que solo nos adaptamos superficialmente a las exigencias de cada situación. Ya sabes, "no hay nada nuevo bajo el sol".

El filósofo Heráclito, por su parte, sostenía que lo único permanente en el universo, es el cambio; y que nunca podrás bañarte en el mismo río, o simplemente bañarte... si vives en la CDMX. El cambio implica un devenir constante de sucesiva transformación y renovación, porque ya sabes “nada se crea ni se destruye...".

lunes, 15 de octubre de 2018

Tu no existes

Hoy vengo a hablarte de ti, aunque con cierto cuidado; porque en la superficie todos nos parecemos mucho, pero en lo profundo, nuestras subjetividades nos diferencian.

Yo se que como a mi, no te gusta demasiado que se refieran a ti mediante un adjetivo que no sientes que te describa, como que te digan que “Pareces vieja”, o “mediocre”, “gorda” y así.

A mi no me gusta que me consideren violador y feminicida en potencia, simplemente por ser un hombre… por ejemplo.

Y los científicos sociales conocen la razón de este malestar, ellos dicen: “toda identidad personal necesita del reconocimiento de los demás para consolidarse”. O sea, ¿qué sentido tiene que yo me diga psicoterapeuta si nadie me reconoce como tal?

Tu no existes

Hoy vengo a hablarte de ti, aunque con cierto cuidado; porque en la superficie todos nos parecemos mucho, pero en lo profundo, nuestras subjetividades nos diferencian. Yo se que como a mi, no te gusta demasiado que se refieran a ti mediante un adjetivo que no sientes que te describa, como que te digan que "Pareces vieja", o "mediocre", "gorda" y así.

A mi no me gusta que me consideren violador y feminicida en potencia, simplemente por ser un hombre... por ejemplo.

Y los científicos sociales conocen la razón de este malestar, ellos dicen: "toda identidad personal necesita del reconocimiento de los demás para consolidarse". O sea, ¿que sentido tiene que yo me diga psicoterapeuta si nadie me reconoce como tal?

Debido a que soy un animal social, necesito que lo que miras en mi, sea un reflejo de lo que creo ser, y me lastima que descalifiques esa imagen positiva que trato de proyectarte.

En general, lo que tu crees de ti son numerosos aspectos del concepto que te has construido de quien eres, y unos aspectos son más importantes que otros. Si te digo que pareces de Michoacán, pero naciste en Colima, puede que te moleste, pero a menos que tengas puesta la camiseta colimense, no te vas a enojar demasiado.

viernes, 12 de octubre de 2018

La raíz de la culpa

Sé que has escuchado cientos de veces que lo bueno y lo malo son relativos; pero es completamente falso. La realidad es que hacer lo bueno te hace bien y hacer lo malo te hace daño. Así, en cortito… está muy simple, ¿no?

Y es que existe un manual con las reglas suficientes para ser feliz, lo único que necesitas hacer, es seguirlas. Pero… ¿quién diablos redactó esas reglas?

Única respuesta posible: Tu.

Desde que naciste y paulatinamente, con la comprensión que vas adquiriendo del universo, has agregado reglas a ese manual que es tu propio código y filosofía de vida, que bien podrías llamar “Mi absolutamente nada breve manual hacia una mejor versión de mi”; en la intuición global de que mientras más te aproximes a la versión ideal de ti misma o de ti mismo, más feliz serás.

Lo bueno entonces, es conducir tus acciones y decisiones, según las reglas que has incluido en tu manual personal; lo malo es traicionarlas. Es cuestión de autocongruencia, y la emoción que funciona como alarma para avisar que estás traicionándote a ti y a tu código personal, es la Culpa.

La raíz de la culpa

Sé que has escuchado cientos de veces que lo bueno y lo malo son relativos; pero es completamente falso. La realidad es que hacer lo bueno te hace bien y hacer lo malo te hace daño. Así, en cortito... está muy simple, ¿no?

Y es que existe un manual con las reglas suficientes para ser feliz, lo único que necesitas hacer, es seguirlas. Pero... ¿quién diablos redactó esas reglas?

Única respuesta posible: Tu.

Desde que naciste y paulatinamente, con la comprensión que vas adquiriendo del universo, has agregado reglas a ese manual que es tu propio código y filosofía de vida, que bien podrías llamar "Mi absolutamente nada breve manual hacia una mejor versión de mi"; en la intuición global de que mientras más te aproximes a la versión ideal de ti misma o de ti mismo, más feliz serás.