El Lecho de Procusto y la homofobia

Procusto quiso ser un emprendedor desde pequeño, y después de explorar distintos modelos de negocio como la hotelería Bed & Breakfast o los Centros Spa de Tortura Punzocortante, terminó decantándose por la venta de camas a la medida. En efecto, el ahora Zar de las Camas, reconocía el valor de un lecho cómodo y ajustado para contribuir así al eterno descanso y satisfacción de sus clientes.

La metodología de ventas era tan brillante como elemental: si al recostarse, el cuerpo del cliente era más largo que la cama, Procusto mochaba con un serrucho la parte de los brazos y piernas que sobresalían del lecho, y si el cliente por el contrario, era más pequeño que la cama, entonces solícitamente, Procusto descoyuntaba sus articulaciones a martillazos con el objetivo de estirarlo.

Excelente servicio  ⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️

Ni que decir que esta segunda estrategia, hoy en día es empleada por su eficiencia y practicidad en algunas clínicas chinas para solucionar la estatura de personas que desean ser más altas.

Fue mucha la influencia que hasta la actualidad, ha tenido la genialidad comercial del visionario Procusto, a quien podríamos nombrarlo "el Steve Jobs de la Grecia Antigua" y quien, lamentablemente, murió a manos de algún cliente insatisfecho (Teseo era un cliente espantoso). Pero habiendo muerto el hombre, se inmortalizó la idea, pues la sabiduría del “Lecho de Procusto" pervive en nuestra sociedad donde quiera que mires.

Para ejemplo, tome usted un hombre cualquiera. Si, un varón de zapatos azules y genitales expuestos, pelo en pecho, barba, mucha testosterona y así, como un hombre debe de ser. Sabemos que el espécimen tiene que ser masculino, dominante, violento y pensar sostenidamente en sexo las 24 horas de los 7 días de la semana. Es por supuesto, como dios manda, porque obviamente ser hombre es lo opuesto a ser mujer, lo opuesto a ser un niño y lo opuesto a ser vulnerable.

...póngalo ahora sobre el lecho de Prpcusto. Si ocurre que el espécimen se muestra más sentimental de lo que determina la norma, puede mocharle sus emociones hasta que se ajusten a la medida correcta. Si sucede que presenta rasgos femeninos, descoyunte el concepto y estima que tiene de él mismo hasta que sea de la talla necesaria. Si tiende a enamorarse de otros varones, que no cunda el pánico, solo sofoque sus afectos. Si suele derrumbarse emocionalmente, cuélguelo por el pescuezo para que no sucumba de nuevo.

Descoyunte su flexibilidad, para que solamente entienda el éxito a partir de parámetros profesionales y financieros; póngale una mordaza para que no incurra en el perturbador accidente de decir “Te quiero” y estire sus manos para que se le de bien ser un buen proveedor. Tenga finalmente, a la mano un carrete generoso de cinta aislante, por si necesita aplastarle un poco el cerebro, para que el espécimen crea que ser un "Hombre De Verdad" es una posición cómoda de mantener.

¿Quién podría negar la genialidad de Procusto?

Tome ahora una mujer elegida aleatoriamente y no se preocupe si ella tiene proyectos personales, distintos al de ser madre, que obviamente es la única razón por la que dios la trajo al mundo; ni sienta que sus anhelos de independencia pueden ser un obstáculo para lograr con ella una mujer en toda regla. Ya conoce la estrategia del excelente dervicio; y si no, échele una revisión a las notas de Procusto que jamás pasan de moda: jale de este lado según dice el esquema, corte un poco por acá, tuerza por aquí y no se olvide de dejarle fracturado el empoderamiento; tenga cerca ese carrete de cinta aislante, por si acaso.

Qué cómodo es el Lecho de Procusto¡!

Recuerde dos cosas. La primera es que jamás hay que perder la esperanza, porque todo hombre y cualquier mujer son perfectibles, no abandone la observancia de su perspectiva crítica y el juicio fácil. Y la segunda es que no estamos fabricando súbditos, sino aliados; todo hombre de verdad y "Mujer De Verdad" van a su vez, a leer el manual de Procusto y aprenderán a dominar sus técnicas. Un día, finalmente, todos nosotros seremos iguales y todas ellas serán igualas.

Disclaimer urgente: Conmemorar el día en contra de la homofobia implica celebrar tanto las diferencias individuales que nos enriquecen socialmente, como establecer un recordatorio de que los modelos de "feminidad" y "masculinidad" tradicionales, son hoy anacrónicos; propios de una sociedad que hace mucho dejamos de ser. Tratar de obligar a unas y otros a ajustarse a modelos de género estereotipados y anacrónicos, es un ejercicio sostenido de violencia cultural...

...o también de Violencia Estructural, si atendemos el modelo de "el triángulo de la violencia" de Johan Galtung (googléalo).

¿A quién afecta la homofobia? Afecta a toda persona que encuentra obstáculos para vivir su masculinidad o su feminidad en sus propios términos y en respuesta de sus necesidades individuales. La homofobia arranca, limita, constriñe y sofoca la potencialidad humana.

El día contra la homofobia es una invitación para que los hombres exploren nuevas formas de vivir sus masculinidades... y sus feminidades de hombre, porque no se necesita permiso para que se valga llorar. Y es una invitación para que las mujeres exploren nuevas formas de vivir sus feminidades... y sus masculinidades de mujer, porque una señorita efectivamente tiene que darse su lugar, el que ella quiera y cual sea que se le pegue la gana para estar.

Este es un día que celebra la diversidad LGBTTIQ... y H, porque también existen personas heterosexuales que están renunciando a modelos de maternidad y paternidad que les intoxicaban, y están explorando modelos distintos de estar en pareja y de ser en persona. Ellas y ellos también forman parte de esta diversidad.

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